Las cabañas en los árboles están ubicadas en Zeanuri, en un precioso enclave de la cima del puerto de barazar, muy cerca de Otxandio, un precioso enclave del País Vasco. Las cabañas están situadas en un impresionante bosque lleno de árboles que ocultan las cabañas y que hace que queden perfectamente integradas en la naturaleza.
El mayor aliciente es la posibilidad de poder dormir en una de las cabañas con unas preciosas vistas a la naturaleza y despertarse por la mañana con los primeros rayos de luz, salir a la terraza y respirar la tranquilidad de la naturaleza.
El complejo está compuesto por una serie de cabañas en los árboles, pero también existe la posibilidad de pernoctar en unos carros cíngaros que se encuentran al lado del caserío principal.
LAS CABAÑAS
Las cabañas están situadas a lo largo de un camino por el que se puede acceder en coche, cada una a una distancia diferente del caserío principal. A lo largo del camino están señalizadas la ubicación de las cabañas, ya que algunas están más ocultas que otras y cuesta verlas desde el camino.
Las cabañas están construidas a diferentes alturas que van desde los 7 metros hasta los 17 de las impresionantes cabañas Txantxangorria y Elaia. Cada una además tiene unas vistas diferentes, desde vistas al bosque o a la montaña, hasta unas increíbles vistas de 360º que tiene la cabaña Suite Oooh!.
Algunas cabañas están adaptadas para ir con niños como las cabañas Ilargi e Izar, a las que pueden acceder niños desde 7 años o la cabaña Hontza a la que ser puede ir con niños desde 0 años y hasta con perros. Otras cabañas como Amalur y Eguzki destacan por ser unos preciosos niditos de amor integrados en el bosque.
Y, por último, cabe mencionar la cabaña Lasai que es un remanso de paz para relajarse, como su propio nombre indica y en la que podéis encontrar incluso una bañera en su interior.
Acceso a las cabañas y servicios
Algunas cabañas tienen el acceso a través de una escalera tipo de caracol o que rodea el tronco de un árbol y otras tienen el acceso a través de una escalera vertical. Además para subir las cosas a la cabaña, hay instalado un sistema de polea en el cual colocas en el gancho la maleta o lo que quieras subir y desde arriba tiras de la cuerda y los subes fácilmente (depende del peso que pongas).
Las cabañas tienen cerca un pequeño espacio por el camino que discurre entre las cabañas donde poder dejar el coche. Cada cabaña tiene el suyo y está perfectamente señalizado.
Todas incluyen los servicios de ropa de cama, toallas y mantas, agua mineral para beber, WC seco (toda una experiencia), estufa ecológica (imposible pasar frio), velas y linternas. Algunas cuentan con ducha, pero las que no tienen, pueden acceder a una en el caserío principal.
Además, todas incluyen el desayuno para tomarlo tranquilamente mientras se disfrutan de unas vistas impresionantes. El desayuno lo colocan en enganchado en la cuerda para que lo subas a la cabaña con la polea.
LOS CARROS CÍNGAROS
Los carros cíngaros eran el típico transporte que usaba el pueblo nómada gitano. Son unos preciosos carros de colores ubicados al lado del caserío principal. Son 4 carros llamados Maide, Basandere, Lamia y Mikolasak.
Los carros tienen los mismos servicios que las cabañas, pero la mayor diferencia, además de que estos están en el suelo, es que el servicio de WC y ducha lo tienen en un edificio contiguo al caserío.
OPCIONES EXTRAS
Cena romántica
La cena consiste en un menú que incluye opciones para vegetarianos y productos ecológicos. También se puede elegir la bebida entre una gran variedad como agua, vino, sidra… etc. La cena, al igual que el desayuno también lo sirven los carros y a las cabañas, dejándolas en el gancho de la polea para subirlas en el caso de las cabañas.
Spa ecológico
También se ofrece la posibilidad de disfrutar durante una hora y de forma privada del increíble spa ecológico que consiste en una bañera redonda calentada con leña a 38º y una sauna finlandesa. El spa está situado en el jardín del caserío, pero cuenta con privacidad para disfrutarlo con tranquilidad y poder relajarse.
Cava para dos
Una preciosa cesta con una botella de cava y dos copas para disfrutar de una refrescante y burbujeante bebida, perfecto para una ocasión especial o porque simplemente te apetece.
Otros extras que se pueden pedir son: flores y bombones en la cabaña o el carro, un cofre de masaje para usar en la cabaña o el carro y un ecopicnic.
COMO LLEGAR HASTA EL CASERÍO Y LAS CABAÑAS
Llegar al caserío principal es sencillo, hay que ir por la N-240, si vamos desde Bilbao hay que subir el puerto de Barazar y una vez arriba seguir la carretera hasta que llega el primer desvío que estará a mano izquierda y donde indica la dirección hacia Otxandio. En el caso de ir desde Vitoria hay que ir por la misma carretera, la N-240 y una vez dejado a un lado el pueblo de Ubidea, hay que coger el desvío a Otxandio, que en este caso estará a la derecha.
Una vez cogido este desvió, en ambos casos, al de pocos metros se encuentra una pequeña entrada a mano derecha donde ya indica que están las Cabañas en los árboles. Ahí encontrareis una zona de aparcamiento para acceder a la recepción que está en el caserío principal y donde también deberéis dejar el coche si pernoctáis en un carro cíngaro o en una de las cabañas que está cerca del caserío.
En el caserío está la recepción donde se hace el check-in. Aquí os explicaran como funciona todo, el baño, la polea… etc. Os pedirán que indiquéis que queréis para desayunar y os comunicarán las horas a las que suelen dejar los desayunos y las cenas. También os harán entrega de una mochila con un kit que incluye la llave de la cabaña o el carro, unas linternas (por si queréis hacer exploración nocturna), un prismático, una guía con los teléfonos donde llamar si necesitaís algo y un mapa con la ubicación de las cabañas.
Con el mapa de la ubicación de las cabañas os explicarán como llegar a ellas y donde aparcar si vuestra opción de alojamiento son las cabañas. El camino es muy sencillo y todo está perfectamente señalizado, no tiene pérdida.
CABAÑA AMALUR
Nuestra opción fue alojarnos en la cabaña Amalur, tuvimos la suerte de que después de los días de lluvia y tormenta, justo el día que fuimos dejó de llover por la tarde, aunque estaba todo mojado. El acceso a esta cabaña es a través de una escalera vertical en 2 tramos, ya que en el medio está la puerta de acceso que hay que abrir con la llave.
Disfrutando del spa y cenando en la cabaña
Además de la cabaña también teníamos los extras de cena, spa y cava. Unos días antes contactaron con nosotros para concretar la hora del spa y como llegamos algo justos de tiempo antes de pasar por la cabaña estuvimos disfrutando del spa acompañados de la botella de cava. Toda una experiencia y un sueño cumplido, porque, ¿Quién no ha soñado alguna vez con darse un baño relajando con una copa de cava (o champán) en la mano?
Después del spa ya fuimos hasta la cabaña. En la cabaña Amalur no se puede subir con ningún bulto por la escalera, ya que es vertical, así que tuvimos que subirlo todo por el sistema de polea. Fue muy divertido, aunque gestionar algunos bultos más pesados o voluminosos se hizo un poco más complicado, pero en general fue bastante sencillo.
A la tarde noche nos pusieron la cena, otro extra que seleccionamos, en la polea para subirlo nosotros a la cabaña. Con respecto a la cena, unos días antes, al igual que con el spa, nos contactaron para comentarnos las opciones del menú y que eligiésemos lo que queríamos para cenar. La bebida en cambio la elegimos al llegar en la recepción. Así pues, una vez subida la cena pudimos disfrutar de una maravillosa velada.
Desayunando en altura
Por la mañana, para el desayuno, el sistema es el mismo, lo dejan para subirlo por la polea. Nosotros, un poco antes de que llegasen con la cesta del desayuno, bajamos con la polea la cesta de la cena y la del cava para que se lo llevasen y no tener la cabaña llena de cosas. Esto es algo que nos indicaron en la recepción que podíamos hacer si no queríamos tener todas las cestas en la cabaña.
Así pues y después de subir la cesta, preparamos la mesa y disfrutamos del desayuno dentro de la cabaña ya que el exterior todavía estaba algo mojado por las lluvias de los días anteriores, pero si tenéis la posibilidad de disfrutarlo en la terraza seguro que es una experiencia increíble.
Nos tomamos la mañana con bastante tranquilidad y estuvimos disfrutando del desayuno con mucha calma. Después poco a poco fuimos recogiendo las cosas, hicimos un montón de fotos y dimos terminada la experiencia volviendo a la recepción a devolver las llaves.
LA EXPERIENCIA
La verdad es que es una experiencia que disfrutamos muchísimo y que teníamos muchas ganas de hacer. En el camino hacia la cabaña íbamos como dos niños pequeños sorprendiéndonos de las cabañas que íbamos encontrando. Fue muy divertido el sistema de la polea y poder dormir en una cama redonda, que nos sorprendió porque era mucho más grande de lo que esperábamos.
El subir a la cabaña de forma vertical, las vistas desde la terraza, dormir con el sonido de los animales por la noche,… todo fue increíble. Lo único que se nos quedó pendiente, y que sobre todo Andoni lo tiene como una espinita clavada, fue no hacer una excursión nocturna con las linternas.
La única pega que podríamos ponerle es que están tan solicitadas que para conseguir noche los viernes o los sábados hay que reservar con meses de antelación. Para que os hagáis una idea, para la noche de un viernes de junio, teníamos la reserva desde el mes de noviembre anterior, 7 meses antes. Si queréis ir en fin de semana, poneos a mirar con tiempo.
Nosotros con la excusa de hacer la excursión nocturna que se nos quedó pendiente ya tenemos un motivo para volver, aunque la verdad es que no necesitamos ninguno porque estamos deseando hacerlo y ya tenemos fichadas las cabañas Elaia y Suite Ohhh! para nuestra próxima aventura.
Os dejamos en enlace a la web de las cabañas por si os animáis donde encontraréis toda la información y podéis hacer la reserva.
Esperamos que os haya gustado el post y que os animéis a visitar este maravilloso lugar porque es una experiencia realmente increíble.
